No hay dudas de que Chris Brown es un tipo súper talentoso. Todo en lo que se mete lo hace bastante bien, ya sea cantar, componer, rapear, jugar basket, pintar, actuar, bailar, etc. Algunos dicen que podría ser el Michael Jackson de esta generación y yo estoy (medio) de acuerdo, pero decidió hacer cosas que lo alejaron de ese estatus de súper-estrella. Y no me refiero a las cosas reprobables de su vida personal (que también), estoy hablando específicamente de música. Pelear constantemente con la disquera y sacar mixtapes con Ray J y Tyga no es algo que otras superestrellas del género como Usher o Beyonce harían. Y lanzar un álbum oficial de 45 canciones es otro de esos movimientos raros. Quizás sólo quería “hackear” el sistema de streaming para llegar al número 1 en el Top 200 de la Billboard. Pero con toda esa estrategia de marketing con documental biográfico incluido y la promoción masiva que tuvo parecía que Chris quería probar algo más con Heartbreak On A Full Moon. Recuerdo el momento cuando lo escuché: fue poco después de su lanzamiento y estaba en una feria que hicieron en el parque de Guanabacoa. Pero en ese momento no me gustó mucho debido a su abultado metraje. Me pasó algo parecido con Indigo dos años después. En 2022 Chris me volvió a ganar con Breezy y entonces volví a repasar (y apreciar) este disco.
Ahora bien, yo estaba en el bando de los que considerábamos que CB nunca había sacado una canción “mala” pero también entendía a los que decían que estaba sacando la misma canción una y otra vez. Y este álbum medio vino a validar esas afirmaciones. Una buena parte de HBOAFM se compone de ese R&B moderno que se combina mucho con el Hip-Hop o más específicamente con uno de sus subgéneros: el Trap. La producción está llena de hi-hats, cajas secas, pesados subgraves de los 808 y ritmos característicos del Trap además de muchas letras rapeadas. La gran cantidad de canciones y el sobreuso de estos elementos crean un ambiente llano y compacto, donde realmente no hay picos ni zanjas, se mantiene “cool” todo el tiempo. Para colmo hay malas selecciones de samples/efectos, como las extrañas tres notas del saxofón en Sensei y ese molesto sonido de conectar dispositivo de Windows (en serio) en Paradise. También hay otra buena cantidad de canciones con influencia de EDM, electropop y ritmos tropicales que en teoría aportan diversidad pero realmente no rompen esa dinámica estática¹ del flujo del disco. Echo en falta temas de R&B más clásico, así como slow jams y/o baladas. Y me sorprende la ínfima cantidad de artistas invitados (solo 14) para 45 canciones. Por primera vez no aparece Lil Wayne, por ejemplo. Lo que salva un poco a HBOAFM de la monotonía es la siempre competente voz de Chris (aunque ayudada por el autotune) y su capacidad de hacer versos y coros memorables con inflexiones vocales interesantes. Por eso algunas canciones promedio sobresalen cuando su voz te “golpea de la manera correcta”, como en On Me y Reddi Wip. Por otra parte, no puedo elogiar mucho sus letras porque no son nada especial. En general tratan temas habituales en el R&B como las fiestas (Hangover, Party), las rupturas amorosas (Paradise, Even, tema título), el sexo (Roses, Confidence, Rock Your Body, Privacy) y el “amor” (Questions, Run Away) de forma bastante sencilla. No hay mucho “coco” detrás de estas letras, pero bueno, ese no es el objetivo del R&B. El álbum levanta un poco el ánimo en las últimas 5 canciones, incluyendo el excelente bop Only 4 Me (feat. Ty Dolla $ign & Verse Simmonds), uno de los mejores temas y que no entiendo como no fue un sencillo promocional. Hablando de singles, de estos solo puedo destacar a Hope You Do (con el mismo sample de Donell Jones que usó Trey Songz en Good Girls Vs Bad Girls), el club-banger Privacy y el dancehall Questions.
Resumiendo: En HOAFM encontramos a un Breezy en modo autopiloto. Es un álbum para los incondicionales… como yo. Los demás (aka la mayoría) si acaso harán una playlist con sus 5 o 10 canciones favoritas. Pero a mí me gusta bastante. Cuando tengo un viaje largo a veces me zampo la versión Deluxe de 57 canciones que llega hasta las 3 horas, 18 minutos y 24 segundos. Si por mí fuera cambiaría algunos temas de la versión regular con otras de la versión Deluxe que considero mejores y aportan más variedad musical. Quitaría This Ain’t, Sensei, Paradise y Covered In You y en su lugar pondría Don't Slow Me Down, Water, Get Off y Secret. Por suerte Chris evitaría caer en la monotonía en trabajos posteriores. Si comparas las mejores 30 canciones de HOAFM con todas las 30 del álbum posterior enseguida notas que Indigo es notablemente más variado y entretenido.
Pasando a otro tema, este disco es interesante porque suscita una pregunta importante: ¿cuánta música es demasiada en un álbum? Para mí el límite disfrutable está en 2 horas. Pero a la mayoría de la gente le es muy difícil siquiera digerir 1 hora. Chris Brown es uno de los pocos artistas que (más o menos) puede salirse con la suya porque tiene el talento suficiente para mantener tu atención por tanto tiempo, aunque las canciones sean similares. Quizás Drake puede ser otro. O Beyoncé. Debería ser alguien que pueda hacer varios géneros. Ah, esa es otra cosa, también depende del género. No se me ocurre una banda de Metal que saque un disco de dos horas y no aburra. Bueno, la verdad nunca he escuchado uno. Probaré con To Be Kind de Swans y después les digo. Otra forma de verlo es: prefiero tener un álbum con muchas canciones de dónde puedo escoger mis favoritas a conformarme con uno más corto del cual sólo me gusten 2 o 3 de 12. Ahora la gente hace eso con las playlist de todas formas.
¹ Parece un oxímoron